El debate se ha apagado, y parece que todo es válido si lo hacemos con un sentido artístico. Hacer un McCurry consiste en alterar la realidad para conseguir una fotografía mejor. Pienso que no lo puedes hacer si perteneces a la agencia Magnum, pero los demás somos libres si lo avisamos.
En esta ocasión voy a trasladar a FERFOTOblog la duda de un alumno para conseguir que su fotografía fuera más limpia. Yo no suelo tratar tanto mis fotografías personales, pero siempre es bueno saber hacer estas cosas por si alguna vez es necesario, tanto por motivos propios como por exigencias profesionales.
Creo que nunca está de más saber cómo se pueden hacer estas cosas para identificarlas más fácilmente cuando vamos a una exposición o vemos un libro y no estamos muy seguros de lo que estamos viendo. Aunque veáis mucha ironía a lo largo del artículo, está dirigida única y exclusivamente a los que hacen estas cosas sin avisar, como el señor McCurry.
La fotografía en cuestión es la que veis arriba. Un grupo de monjes en Laos donde solo uno nos mira. Y dos que nos dan la espalda y estropean la composición. Un ejemplo perfecto para hacer un McCurry, pues queremos que todo sea único.
Cómo hacer un McCurry
En esta ocasión partimos de un archivo RAW de gran calidad, bien expuesto. Lo primero, como siempre es un buen revelado siguiendo los diez pasos que recomiendo sin parar. En este caso la fotografía queda como veis.
Abro la fotografía en Adobe Photoshop y me centro en observarla. Quiero que el espectador solo vea al que le está mirando. Para conseguirlo tengo que eliminar al grupo de dos personas de la izquierda.
Tengo dos opciones. En realidad tres:
- La primera, por obvia y sencilla, pero fuera del espíritu McCurry (parece que su ética le impide recortar las fotos y siempre saca el fotograma completo, a lo Cartier Bresson) sería recortar en formato cuadrado.
- La segunda consiste en prolongar la pared blanca del fondo. No es mala idea, pero pienso que hace la fotografía demasiado sencilla, escueta. Y puede que poco creíble por la posición del muro, que no es totalmente paralelo al fotógrafo.
- Por último, y la fiel al espíritu McCurry, y más difícil para alguien poco acostumbrado a estas lides, es eliminar a los dos monjes que tanto molestan y conservar esa pared negra de la izquierda.
La última opción es la que más retos presenta, pues dichas personas tapan las esquinas de la pared y del murete de la izquierda. Pero de algo estoy seguro es que se puede hacer y resultar creíble…
La primera solución
Aunque es muy sencilla y casi carece de sentido hablar de ella dentro del espíritu transgresor de McCurry, voy a comentar cómo se hace.
En realidad es algo que debemos hacer durante los diez pasos. En concreto el paso 4. En Adobe Camera RAW, Lightroom o el programa que más rabia nos de, acudimos a la herramienta de recorte y elegimos la proporción 1×1, es decir, cuadrada.
Y ya está. Personalmente pienso que es la mejor opción y la que menos quebraderos de cabeza da. Pero no estamos para que la vida sea sencilla si somos seguidores de McCurry y sus fotos periodísiticas, digo artísticas.
La segunda solución
Esta solución es más interesante para aquellos que persiguen algo más complicado o que por exigencias del guion necesitan una fotografía en formato horizontal.
- Después de revelar nuestra fotografía, la abrimos en Photoshop como imagen. No es necesario abrirla como Objeto inteligente.
- Con la herramienta Marco rectangular selecciono toda la parte derecha de la fotografía, justo hasta donde están los dos monjes que quiero retirar amablemente. Si no lo consigo a la primera, hago clic con el botón derecho del ratón dentro de la selección y elijo Transformar selección para ajustar sin problemas.
- Ahora, con el botón derecho del ratón, y de nuevo dentro de la selección, marco Capa vía copiar. Así tendremos la capa original y otra con este nuevo recorte.
- Desactivamos la visibilidad de la capa original en el icono del ojo del panel Capas.
- Activamos la capa recortada y hacemos una selección lo más precisa posible con Marco rectangular.
- Vamos a Edición>Escala según el contenido. Y estiramos por el lado izquierdo. El milagro sucede.
- Como he estirado tanto, algunas zonas se han roto. Lo mejor es activar la herramienta Parche y tapar esas pequeñas imperfecciones.
En próximos artículos veremos cómo lo haría el equipo de Steve McCurry para conseguir la máxima pureza en sus fotografías. Sería el tercer paso. Espero que os guste lo que hemos visto por ahora.