Algún día los fabricantes harán la cámara perfecta, esa de la que nunca nos querremos desprender y a la que no veremos ningún fallo. Hoy se acercan muchas, pero todavía queda mucho camino.
Aunque a muchos nos duela, se acerca la navidad. Y a lo mejor podemos pedir a los reyes magos, a Papa Noel, al Olentzero o a nuestra agente de la condicional un euro para la primera entrada de una cámara nueva. Yo tendré que seguir con las mías un poco más, en fin…
Ya he dicho alguna vez que las máquinas de hoy en día son casi perfectas, pero ninguna tiene elderecho a ostentar tal título. Después de leer este artículo espero que muchos estaréis de acuerdo sobre cómo debería ser, siendo lógicos y sin pedir imposibles.
Realmente, para poder tenerla en nuestras manos ahora mismo deberíamos convertirnos en el álter ego del complicado doctor Frankenstein. Armarnos de paciencia y destornilladores, un buen ordenador, y confiar en que las tormentas quellegarán algún día a estas tierras revivan al pobre monstruo que saldría de nuestras mentes enfermas. Pero creo que no sería nada difícil para los fabricantes crearla. Lo malo es que no quieren escuchar a los consumidores, o al menos es lo que parece.
El cuerpo de la cámara perfecta
No necesitamos el cuerpo más ligero ni una pesa para ese gimnasio que muchos pisaran sólo en enero. Alrededor de medio kilo es el peso ideal para tener la sensación de llevar entre las manos un objeto contundente pero que no sea una losa. Los que tengan la Fuji XPro 1 lo entenderán. Un buen material que aguante el paso del tiempo y ninguna presencia de plásticos endebles.
Por supuesto, debería estar sellada contra la intemperie. No hace falta que se pueda sumergir, pero sí que aguante una tormenta o quince días en la playa. Si le pusieran pocos botones y unos cuántas ruedas mecánicas sería todo más sencillo. ¿Por qué miran tan poco el diseño de Leica? Ya no serán punteros tecnológicamente pero su construcción sigue siendo una referencia.
Las conexiones serían las justas, ni una más ni una menos, y jamás exclusivas de la marca. Y por favor, una trampilla para la batería y otra para la tarjeta. No hay nada más incómodo que ambos elementos juntos.
El sensor
Aquí podríamos hablar largo y tendido, pero creo que es importante poner los puntos sobre las ies, es decir, ser lo más claro posible. El 99 % de los fotógrafos no necesita más de 10 Mp en su vida, y si todos fuéramos buenos, con 6 Mp estaríamos sobrados. Tantos millones de píxeles sólo sirven para grandes ampliaciones y enormes recortes. Pero hay pocos que amplíen más de un DinA4 y muy poca gente necesita recortar tanto, solamente los que no son conscientes de tener que hacerlo.
Los fotógrafos sólo pedimos un buen tamaño de sensor a un precio todavía mejor. Duele comprar un FF a más de 2000€. Existen cámaras de sensores más pequeños fabulosas, pero la profundidad de campo y la calidad a altos ISOS de una Nikon D810, por ejemplo, no la supera nadie.
Lo que queremos todos de verdad es un sensor con un amplio rango dinámico, que aparque en el baúl de los recuerdos la historia de los HDR. Que sea capaz de evitar el ruido en las sombras y no sacrifique el detalle. Y que el color no sea un quebradero de cabeza. Todo esto ya está solucionado, se llama sensor Foveon y la patente la tiene Sigma. Qué bueno sería que compartiera esta tecnología y entre todos sacaran el sensor definitivo.
Captura de imagen
RAW, RAW y RAW… pero de verdad. Algunos fotógrafos estamos cansados de disparar en este formato crudo y tener que imaginar cómo nos ha quedado la exposición porque lo que vemos en la pantalla es la interpretación jpeg que hace la cámara. Queremos ver el histograma del RAW real, sin intermediarios.
Y puestos a pedir, queremos calcular la exposición sin tener que hacer artimañas para derechear. No tiene sentido que los fotómetros sigan midiendo para el gris medio. ¿No se han enterado que ya no se trabaja con película?
¿Y por qué no crean archivos reales de 16 bits? Muchas cámaras ya disparan archivos de 14 bits, pero resulta que gran parte de la información con la que trabajamos en el ordenador es interpolada, inventada, sacada de la nada. Soy fotógrafo, no informático, pero creo que no hay ningún problema para generar esos dos bits extra de información. Pesará más, eso sí. Si han logrado pasar de 12 a 14 bits… Prefiero 16 bits reales a 50 Mp.
Objetivos
Es verdad que mucha gente se conforma con la calidad de los objetivos y el zoom digital de los teléfonos móviles. Es increíble lo que consiguen, pero un buen objetivo es fundamental para una buena fotografía. No estoy pidiendo que todos sean Zeiss, Leica o Sigma Art (estaría bien) pero sí que dejen de vender esos objetivos sin luminosidad alguna, con aberraciones y distorsiones por doquier.

Sería bueno que volviera la moda de los fijos (también en otros aspectos). No hace falta crear objetivos caros, nos conformamos con el 50 mm 1,8 o el 35 mm f2. Con semejantes luminosidades podrían dejar de inventarse esos ISOS altos e imposibles e inutilizables y enseñar la calidad real de sus máquinas. Uno de estos quedaría perfecto como parte del kit.
Sé que a uno solo no le van a escuchar, pero si todos nos ponemos pesados, con suma educación, puede que algún día nos hagan caso y tengamos entre las manos la cámara perfecta de nuestros sueños.